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lunes, 12 de diciembre de 2011

El jazmín de Berto





El frío deja la huerta esquelética, vacía, aletargada... Sin embargo este jazmín se rebela a dejar de florecer. Diariamente pasamos por la plantita y Alicia coge su pequeña y blanca flor y se la lleva la nariz. Pero ahora no huele con la intensidad del verano. Aunque ella sigue diciendo: "Mmmm... Qué bien huele!!!"

Mami, me gustan las hojas del otoño


El paseo de vuelta a casa es muy gratificante en otoño. La crujiente sensación al pisar hojas secas es estupenda. Ni siquiera me he atrevido a quejarme por el estado en que iban a acabar las botitas de la peque. Cada época del año tiene su encanto y de ésta destaco el sonido de nuestros paseos por las higueras.





sábado, 10 de diciembre de 2011

El colecho



Alicia no ha tenido cuna. Bueno... sí la tuvo, la heredó de su prima, pero no la usó. Desde que nació fue una niña muy inquieta y llorona. Pasábamos toda la noche en vela (y el día también) Comprobamos que meterla en la cama con nosotros nos permitía dormir toda la noche.

Hoy día, no sólo admito mi debilidad, sino que, además, la defiendo. Soy partidaria del colecho o, mejor dicho, estoy en contra de la cuna. Los niños deben estar en los brazos de sus mamis, en la cama con ellos, abrazados y acurrucados, no solitos en una fría e inerte cuna.

Dejo aquí una noticia que aboga por esa forma de sueño:

Uno de los expertos británicos más importantes en salud mental infantil ha aconsejado a los padres olvidarse de años de convenciones y permitir que sus hijos duerman con ellos en la cama hasta los 5 años de edad. Margot Sunderland, directora de educación del Centro para la Salud Mental Infantil de Londres, dice que la práctica conocida como colecho aumenta la probabilidad de que los niños crezcan sanos y tranquilos. Sunderland, autora de 20 libros, perfila su consejo en su libro "La Ciencia de Ser Padres". Y está tan segura de los hallazgos del nuevo libro, basado en 800 estudios científicos, que pide que a los visitadores sanitarios se les repartan folletos para informar a los padres sobre el colecho.
Sunderland argumenta que la práctica habitual en Inglaterra de adiestrar a los niños para que duerman solos desde las pocas semanas de edad es perjudicial, porque cualquier separación de los padres incrementa el flujo de hormonas del estrés como el cortisol. Sus resultados se basan en avances científicos de los últimos 20 años sobre cómo se desarrolla el cerebro del niño y en estudios que han utilizado scanners para analizar cómo reaccionan en circunstancias especiales. Por ejemplo, un estudio neurológico de hace 3 años mostraba cómo un niño separado de uno de sus padres experimenta una actividad cerebral similar a un niño con dolor físico.
Sunderland cree también que la práctica actual se basa en actitudes sociales que deberían ser abandonadas: "Existe un tabú en este país referente a que los niños duerman con sus padres" dijo. "Lo que he hecho en este libro es presentar la evidencia científica. Estudios en todo el mundo demuestran que el colecho hasta los 5 años supone una inversión para el niño. Los niños pueden sufrir ansiedad por la separación hasta los 5 años o más, lo que puede afectarles en la vida posterior. Esto se calma con el colecho". Los síntomas pueden ser también físicos. Sunderland cita un estudio que demostró que un 70% de mujeres que no habían sido consoladas cuando lloraban de niñas, desarrollaron en la edad adulta problemas digestivos.
El libro de Sunderland la enfrenta a gurús de la educación ampliamente leídos como Gina Ford, cuyos consejos son seguidos por miles de padres. Ford aboga por establecer rutinas de sueño para bebés desde una edad muy temprana en cunas "separados del resto de la casa" y enseñarles a los bebés a dormir "sin la ayuda de los adultos". En su libro "Guía completa de sueño para bebés y niños satisfechos" escribe que los padres necesitan tiempo para ellos. "El compartir la cama con los niños termina con frecuencia con los padres durmiendo en habitaciones separadas y con madres exhaustas, una situación que aporta una gran presión en la familia como un todo".
Annette Mountford, jefa ejecutiva de la organización de padres "Lazos de familia" confirmó que la norma en Inglaterra para los niños era animarles para que durmieran en sus camas y sus cunas, a menudo en habitaciones separadas, desde una edad temprana. "Los padres necesitan su espacio" dijo. "Existen beneficios claros en el hecho de introducir a los niños en su propia rutina de sueño en su propio espacio"
Contrariamente, Sunderland dice que cambiar a los niños a sus camas desde que tienen semanas de edad, incluso si lloran por la noche, ha demostrado incrementar el nivel de cortisol. Estudios con niños menores de 5 años demuestran que en más del 90% de los casos, el nivel de cortisol aumenta cuando van a la guardería y en el 75% de los casos disminuye al volver a casa.
El profesor Jaak Panksepp, especialista en neurociencia de la Universidad Estatal de Washington y que ha escrito el prólogo del libro, dice que los argumentos de Sunderland son "una historia coherente consistente con la neurociencia. Una sociedad avanzada debería tenerlo en cuenta".
Sunderland argumenta que poner a los niños a dormir solos es un fenómeno occidental que puede incrementar la posibilidad de muerte en la cuna, también conocida como Síndrome de Muerte Súbita del Lacante (SMSL). Esto puede suceder porque el niño echa de menos el efecto calmante que el estar tumbado junto a su madre ejerce en la respiración y en la función cardiaca. "En el Reino Unido mueren 500 niños al año por SMSL" escribe Sunderland. "En China, donde el colecho es práctica habitual, el SMSL es tan raro que no tiene nombre".
Este artículo ha sido escrito por Sian Griffiths y traducido por Ofelia Urzainqui del grupo Vía Láctea.

jueves, 8 de diciembre de 2011

El Portal de Belén

Siempre he sido un tanto agnóstica y nunca me ha llamado especialmente la atención eso de montar un Portal de Belén en casa. Pero desde que nació mi hija, han acontecido en mi vida ciertas cosas que me han hecho desarrollar un sentimiento religioso peculiar. Pero eso es algo que ya contaré, si se tercia, más adelante.


El caso es que desde que ella nació hemos tomado como costumbre montar el Belén en casa el mismo día de su cumpleaños dada la cercanía de la Navidad a la fecha del nacimiento de mi pequeña.


Con este, ya son tres los años que mi niña celebra la Navidad, pese a tener sólo dos añitos, claro está. Y siempre hemos puesto las figuras del Belén en una mesita encima de un tapetito con tonos rojos que tenemos en casa. Vamos... que tampoco nos hemos calentado mucho la cabeza en buscar lentisco, tierra, musgo..., hacer el río, en definitiva, lo que vengo a decir es que nunca me he molestado en crear el escenario típico del Belén y sólo me he limitado a desempolvar las figuritas y colocarlas en la mesa.


Pero este año, cuando hemos puesto el misterio, mi hija se volvió loca, corría por la casa, iba y venía una y otra vez a darle vuelta al Belén, nombraba las figuritas y, como le dije que se mira, pero no se toca; la pobre mía sólo pasaba ligeramente la yemita de su dedo por el tapete.

El caso es que me han entrado ganas de ambientarlo mejor y si acaso hacerme con alguna que otra figurita más ya que sólo cuento con el misterio y los tres Reyes Magos. No sé... poner el río, algunos pastorcillos, gallinitas... Hasta había pensado poner los animales de la granja que Alicia tiene para jugar.


Este fin de semana voy a darme un paseo por el campo a ver si encuentro algo que me pueda servir para que Alicia alucine aún más, si cabe, con su Portal de Belén.

Cuentos completos de Beatrix Potter.

Llevaba tiempo queriendo hablar de este libro de Beatrix Potter. Es un libro maravilloso, con unas ilustraciones increíbles que te animan a leerlo y releerlo una y otra vez.

La primera vez que lo tuve en mis manos fue en la biblioteca del colegio, buscando bibliografía para los peques. Pero apenas le presté atención por no coincidir con la búsqueda que llevaba en mente. Pero, después de un tiempo, una mami homeschooling me lo recomendó. Así que volví a la biblioteca y me paré más en los detalles y la historia. Sinceramente, me fascinó y me apresuré a comprárselo a Alice.

Sin embargo, mi hija no parece muy entusiasmada con él, creo que es por el peso que tiene el Quijote de Potter; las pequeñas manos de mi hija no pueden abordarlo bien. Así que lo he apartado por un tiempo deseando que pronto demande las historias de esta gran escritora e ilustradora.

Feliz Cumpleaños, muñeca!!!



Esta semana celebramos el segundo cumpleaños de mi hija. De los dos que llevamos, este es el más alegre, el más divertido. El año pasado quedaban muchas cosas por superar a nivel médico, aún no habían operado a Alicia de su hendidura palatina y el miedo nos tenía petrificados.

Así, en su primer cumpleaños, como en cualquier otro momento anecdótico que vivíamos con la pequeña, una sensación agridulce nos embargaba y era raro el día que mi ojos no derramaban alguna lágrima.

Hoy día, con su paladar reconstruido y la alegría y viveza que desprende, sumada a su afán de superación, Alicia nos tiene a todos locos. No puedo estar más contenta. ¡¡¡Feliz cumpleaños mi vida!!!

Versos con moraleja.

Hace tiempo que nos hicimos con unos cuantos libros de la coleción LEE CON GLORIA FUERTES de la editorial SUSAETA. Los deje un poco apartados en la estantería por considerar que aún no era acertado mostrárselos a Alicia. Pero el otro día me puse a ojear uno de ellos y me encantó el librito. Dejo aquí uno de los poemas que más nos gustó:




Don Pato y don Pito
dan un paseíto.

-¡Qué suerte, don Pito,
me encontré este güito!

Y los dos lo quieren
y los dos se hieren.

Y todos se extrañan
de ver que regañan.

Y mientras se zumban,
bailando la rumba...

Viene el dueño, otro patito,
y éste se lleva su güito.

¡No discutid, muchachitos,
no discutid por un güito,
para que nunca os suceda,
lo que a don Pato y don Pito!

Mirar con lupa

Este libro nos ha conquistado. Un paseo por las grandes obras maestras de la pintura que viene acompañado de una explicación de muchos detalles de los cuadros, hasta ahora, desconocidos para mí. Alicia se pasa largos ratos mirando las láminas. Al final del libro viene recogida una imagen de todos los cuadros juntos que nos sirve para jugar a las adivinanzas y reconocer el nombre y el autor de las diferentes obras. La Gioconda, el matrimonio Arnolfini, La creación de Adán, El taller del artista, La primavera... Un montón de obras abordadas en este libro de gran formato que nos hace pasar grandes ratitos en el sofá resguardadas del frío.


sábado, 19 de noviembre de 2011

¡Qué día más frío!

Hoy amaneció lloviendo y con mucho frío. Lo primero se agradece, además es sábado y me encanta oir llover, todos calentitos en casa sin tener que ir a trabajar. Lo segundo, no gusta tanto; llevamos todo el día consumiendo energía para calentarnos, acurrucaditos debajo de la mesa camilla. El frío se ha apoderado también de los juegos de Alice, que ha abrigado bien a sus bebés y les ha dado un "bibi de cheche cantica".

sábado, 22 de octubre de 2011

El biberón mágico, para niños con hendidura palatina.

Llevaba tiempo queriendo escribir sobre el biberón que tuvo Alicia desde que tenía apenas una semana. Ella nació con hendidura palatina y en el hospital no me informaron de la existencia del biberón haberman, especial para niños que nacen con este problema. Tan sólo me dieron una tetina con una lengüeta enorme que daba náuseas con sólo mirarla. Así que los primeros días de vida de Alice fueron alimentados con una jeringuilla y un biberón normal al que le debía apretar en la boquilla para que saliera la leche, dado que mi pequeña no podía succionar bien. Fueron unos días terribles de llantos y desesperación, pero las madres parece que estamos dotadas de una pasta especial que nos hace intuir cosas que nadie más es capaz. Diseñé mi propio biberón, probé con diferentes marcas, pero sólo uno me sirvió eficazmente. Compré el famoso biberón anticólicos del Dr. Brown (ver foto) y lo despojé de su tetina original para colocarle una de caucho de la marca suavinex de boca ancha, especial para papillas(ver foto). Le hice un corte limpio en la parte superior y a partir de ese momento la vida de mi niña y la nuestra se normalizó. Como si no tuviera nada en la boca, comía perfectamente, sin necesitar de apretar la boquilla, ella misma con su pequeña encía conseguía extraer la leche. Y no penséis que tardaba en tomarse el biberón, nada de eso... Se lo tomaba en un plis plas. Cuando supe de la existencia de los biberones especiales para niños con hendidura y/o labio leporino, ya mi niña se había hecho con la mamadera que su mami le diseñó. Así que para los papis que no tienen acceso al haberman, les aconsejo que prueben con mi experimento porque os aseguro que surte efecto.

Dora la exploradora



Esta muñeca se ha convertido en su muñeco de apego, es blandita, pesa poco y Alice ve personificada en ella a la de los dibujos animados que tanto le gustan. Además se ha convertido en una de mis mejores aliadas para el desarrollo del habla. Alicia nació con hendidura palatina y gracias a esta serie mi pequeña aprendió a decir la /p/ con la canción del mapa. Hace apenas nueve días disfrutamos en casa de ese sonido que es para nosotros música celestial.

sábado, 8 de octubre de 2011

El parque de la batería de Torremolinos












































Esta tarde hemos estado en un parque espectacular, colorista, divertido y mágico!!!! Un espacio de ensueño donde chicos y grandes pueden pasar una tarde maravillosa. Un lago precioso, un cuidado de los jardines sublime, una cantidad de atracciones infantiles de lo más variada y un olor a mar mediterráneo de lo más agradable.

En una zona discreta del lugar, se encuentra un olivo centenario cargado de chupetes que nos traslada al mundo de los cuentos. De tradición nórdica, el árbol de los chupetes es un recurso muy eficaz para ayudar a nuestros pequeños a deshacerse de un objeto tan preciado.

Por motivos ajenos a su voluntad, mi chiquitina tuvo que desprenderse de su chupe hace ya unos meses, así que hoy no ha sido muy traumático dejar los suyos colgaditos del olivo.

En fin... si tenéis tenéis niñ@s y la oportunidad de visitar ese parque, hacedlo, os aseguro que no os arrepentiréis.

El circo

Hace poco llevamos a mi hija por primera vez al circo y nos sorprendió ver que la campeona pasó sentada las dos horas de duración del espectáculo eclipsada y entusiasmada con los animales, los payasos y la gran variedad de atracciones que nos ofrecieron (no esperábamos menos dado el coste de la entrada). Este circo nos ha ayudado a que Alicia supere su aversión a los payasos, ya que su último contacto con ellos fue el siniestro payaso del tren de la bruja que en la feria daba escobazos a diestro y siniestro. Ahora le gusta que le cuenten cuentos e historias en los que aparezcan payasos, que le ponga música de payasos, hasta ha retomado su peluca de rizos... jeje. A partir de este nuevo contacto con este personaje siempre nos recuerda que el payaso ¡¡¡¡¡YA NO TIENE ESCOBA!!!!!!.

sábado, 17 de septiembre de 2011

La guardería III

Es increible el cambio de actitud que mi hija ha tenido con respecto a su estancia en la guardería. ¡¡¡¡Me despierta a las siete de la mañana y me pide que la lleve a su cole!!!!.

Le digo que aún es temprano, que duerma un poquito más, pero no... Hay que levantarse, hacerle un vasito de leche con cereales y vestirla para llevarla a su cole. Todo este ritual diario ha de hacerse aferrada a la mochila que no la suelta ni para vestirse. Le encanta ir a la guardería, todos decían que sería cuestión de tiempo y efectivamente así ha sido. Decenas de compaeñerit@s comparten con ella diariamente juegos y experiencias en un entorno divertido y lúdico.

Ahora me alegro de no haber desistido, de haber seguido intentando su integración en la guardería. Además está el tema de la alimentación que, aunque ella no sea excesivamente difícil con las comidas, su convivencia con otros niños le está sirviendo para adoptar comportamientos más autónomos e independientes en cuanto al comer solita se refiere. Además de eso se suma lo rica que está la comida que allí se sirve, una dieta sana, equilibrada y supervisada por un pediatra.

Desde que está en la guardería, Alice me pide que le ponga la música que allí escucha, se sabe las canciones, las tararea y juega en su cuarto mientras suena la música del método que están usando allí. Canta, baila, juega y a cada paso me recuerda el nombre de sus amiguit@s y las cosas que hace en su cole.

¡¡¡Ayyy... qué feliz soy!!!

martes, 6 de septiembre de 2011

La guardería II

Otro sofocón el tercer día de guardería, esta vez movido por el berrinche de otros niños desconsolados que, de forma epidémica y directa, contagió a todos los demás, incluida mi hija, claro... Así que no puedo describir con palabras el ensordecedor momento que hemos vivido. A mi hija se le salía, casi literalmente, el corazón por la boca, se aferraba a mí, no podía casi articular palabra... y yo con un pellizco en la boca del estómago que alentaba a mi desayuno a salir disparado.

Un instinto sobreprotector imperaba sobre la necesidad de mantener a la niña en aquel lugar. Así que la agarré en brazos y salí de allí en plan madre coraje, la monté en el coche y me la llevé. De camino para casa, un sentimiento de estúpida me embargaba, arrobada por el pensamiento de que haciendo lo que acababa de hacer sólo iba a conseguir que la niña me tomara el pelo y que la próxima vez que decidiera llevarla a la guardería iba a ser todavía más traumático.

Llegue a casa de mi madre, que me miró como si hubiese cometido un sacrilegio. Y yo... con mi cara de tonta, contradiciéndome a mí misma en mis pensamientos. Haciéndome la madre valerosa que le ha evitado a su hija un tortura china. Pero simultáneamente, era consciente de que sacar así a la niña de la guardería no era la mejor opción si quería que la chiquilla se acostumbrara a convivir con niños y se adaptara a ese nuevo entorno, eso teniendo en cuenta mis circunstancias profesionales.

Entonces volvió a cambiarme el chip, pedí a mi hermana que me acompañara y volvimos, media hora después a la guardería.

Muy amablemente, la directora nos abrió, nos entendió y nos brindó la oportunidad de llevarla a partir del día siguiente un poco más tarde, una vez que los pobres angelitos se hubieran calmado. Así Alicia no viviría los primeros y dolorosos gritos de la mañana y no mostraría tanta reticencia como cuando llega a primera hora.

Dejé a la niña allí, sin llantos, sin dramas y, sorprendentemente, se puso a comer cereales sentadita en su silla, como si nada. En ese momento reinaba la calma (impensable media hora antes). Todos los niños tranquilos. Su educadora, salió después, una vez que yo estaba fuera y me invitó a asomarme cautelosamente por la ventana de la cocina. Me resultó grato ver que Alicia estaba tranquila, comiendo, calmada y hasta diría que lo pasaba bien.

Madre mía!!! Todos dicen que el proceso de adaptación es algo normal, pero que en poco tiempo se acostrumbran y hasta disfrutan de su estancia en la guardería rodeados de niños y juguetes. Yo sólo espero es que ese momento llegue pronto, porque si no es así, tendremos que buscar otras alternativas.

lunes, 5 de septiembre de 2011

La guardería

Siento que soy una malísima y pésima madre por llevar a mi hija a la guardería. El viernes fue su primer día, fue una tortura para las dos. Me gustaría tener la posibilidad económica suficiente para no trabajar y disfrutar de mi hija siempre, a todas horas. No sé qué tipo de economía tendrán las mamis homeschooling, pero ha de ser bastante desahogada como para permitirse el lujo de ser ellas quien se encarguen de la formación y la educación de sus hijos.

El periodo de adaptación debería ser de una manera muy diferente a como Alicia lo está viviendo, se debería plantear de manera más humana. Durante una semana o quizá dos, los padres deberían pasar allí todo el tiempo con sus hijos, e ir menguando progresivamente su estancia en la guardería, pero no. Apenas he podido quedarme con ella, la monitora se empeñaba en que era mejor si yo no estaba. Yo pensaba para mis adentros: ¿No sería mejor que la chiquilla tuviese la tranquilidad de que su madre va a estar con ella aquí? Así de esa forma ella se iría familiarizando con ese nuevo entorno.

Hoy ha sido peor, si cabe. Ha llorado, pataleado, ha tirado de su mochila para la calle, me miraba con ojos de "por qué me haces esto". Dentro de media hora voy a recogerla . Se me está haciendo eterna la mañana y eso que he intentado mantenerme ocupada. En fin, tengo ganas de verla y que me cuente su experiencia.

viernes, 12 de agosto de 2011

Pasión por el agua

Desde muy bebé Alice ha tenido una atracción por el agua fuera de lo común. Le fascina chapotear en la bañera, en la piscina, en la playa. . . Vivimos en un lugar privilegiado, en contacto con la naturaleza. Hay regueras con agüita del río para los cultivos; y ella ve cómo mis tías lavan allí la carga de verduras y hortalizas, riegan las plantas y están todo el año pululando alrededor de ellas.
Si por mi hija fuera, se zambulliría en el agua a todas horas, le da igual la época o lo fría que pueda estar el agua.
El otro día, en la feria, mi padre consintió a mi hija con un caballo exactamente igual que este de la foto. Ella lo eligió de entre todo el ramo de helio. Después de pasearlo toda la noche y, por supuesto, llevárnoslo a casa; al día siguiente, movida por una lógica aplastante, Alice tiró de la cuerda puso a su caballo en el suelo y se montó encima galopando al son de la famosa canción popular: En un caballito gris mi niña se fue a París, al paso, al paso... al trote, al trote... a galope, a galope, a galope (Imaginad cómo quedó el globito).

Y es que hasta los veinte meses de edad, ella nunca había visto ver volar a un caballo. Así que he aprovechado para buscar libros sobre unicornios y seres mitológicos y empezar a contarle cuentos al respecto. Acepto recomendaciones.

En fin. . . Después de perder el helio se lo hemos vuelto a inflar con la boca y claro. . . ya es un caballo "normal", ¡¡¡No vuela!!! Así que mientras le dura, ella sigue cabalgando como capitana de los husáres con su caballo blanco. Creo que este año, los Reyes Magos dejaran atrás los camellos y vendrán a casa en una jaca.

He extraido este esquema del libro Pórtate bien de Maria Luisa Ferrerós, me ha parecido muy interesante ver cómo de un dibujo se puede analizar el estado emocional del niño, además de este esquema hay otro sobre el contenido de los dibujos. No me ha dado tiempo a hacerlo antes de que Alicia despertara de la siesta (HOY A DORMIDO!!!!)

Alice aún es pequeña, sus trazos se limitan al mero garabateo y al uso indiscriminado de los colores que, pese a conocerlos, tampoco veo que exista cierta predilección por unos en concreto. Más adelante comprobaré lo efectivo que es este esquema.

jueves, 11 de agosto de 2011

El otro día pasamos una siesta muy entretenida diseñando la disposición de una granja de goma eva que, al humederse, podía pegarse en las baldosas. Alice lo pasó en grande con el agua, no se conformaba con mojar sólo las figuras de eva, jeje.. A la refrescante experiencia se sumó mi sobrina que, al ser más mayor, llevó las riendas de la actividad en cuanto a la ubicación que debían tener las figuras. Después de colocarlas inventamos un bonito cuento sobre los animalitos de la granja.
Después de ese día las figuras han tomado distintas funciones, han servido como mordedores para aliviar la dentición (mi pequeña está pasándolo fatal con su boca), como muñecos dentro de construcciones de bloques, hasta como acompañantes en el colchón durante las horas de sueño(cualquiera se las quita).

miércoles, 10 de agosto de 2011

La mente absorbente

Cada día que pasa me apasiona más la pedagogía Montessori, son muchos los autores que defiende la estimulación infantil en la etapa de 0-6 años, la etapa que María Montessori define como MENTE ABSORBENTE.

Según María Montessori, la primera etapa del desarrollo de 0-6 años es la más importante por ser ésta la etapa en la que se forma el adulto futuro.
Dentro de las capacidades sensoriales y motoras del niño, él manifiesta la memoria, la intencionalidad, la voluntad, la selección y la ejecución. La mente del pequeño absorberá hará suyo todo lo que le llega a su espacio receptivo. El niño asimilará todo lo que recibe en su entorno. Toda la información que recibe la hará parte de su experiencia.

martes, 9 de agosto de 2011

Las aves

Estas imágenes son dos de las 30 flashcards que diseñé para Alice. Las tenemos plastificadas y encuadernadas a través de una anilla.
Le encantan las aves, así que este material, además de ayudarla en el desarrollo del habla, al afanarse en pronunciar bien el nombre de cada una de las aves, también es una bonita forma de ampliar vocabulario y conocer mejor el mundo de la ornitología.





Los bloques de Froebel

Le hemos comprado a Alice una enorme bolsa de los universales bloques de construcción. Este popular juguete fue inventado por el prestigioso Froebel y, entre las innumerables y beneficiosas aportaciones de los bloques, quiero señalar su contribución al desarrollo del juicio crítico, a la destreza manual y al desarrollo de la capacidad de razonamiento.


A mi pequeña le ha entusiasmado el regalo, se pasa largos ratos apilando, desmontando, incluso clasificando por por colores.


He podido ratificar lo productivia que es la teoría de María Montessori, la cual aprobaba la convivencia en un entorno de aprendizaje de niños de diferentes edades, de manera que los mayores ayudan a los pequeños y esa ayuda prestada refuerza el aprendizaje de los de más edad.


Mi sobrina de siete años le mostró cómo construir un micrófono de mano para jugar posteriormente a ser cantante. Pues bien, hoy, la peque solita ha apilado algunos bloques y ha construido su micrófono, una vez creado se ha levantado del suelo y se ha puesto a cantar el cumpleños feliz ayudada de su original micrófono.

domingo, 7 de agosto de 2011

ALICIA, mucho más que un nombre.

Mi pareja delegó en mí la responsabilidad de buscarle el nombre a nuestro bebé, así que, cuando supimos que sería una niña, fueron muchos los nombres que barajé, pero siempre que planteaba uno como posible candidato para nuestra pequeña, acababa desechándolo al encontrarle alguna pega.
Un día, estando ya embarazadísima y sin las ideas claras respecto al nombre, vi la película ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS, un cuento en el que nunca antes me había parado a atender detenidamente y... sencillamente, me fascinó. Por muchos motivos, pero si tengo que elegir uno de ellos, me quedo con el momento de la película en el que la liebre y el sombrerero loco celebran la fiesta de "no cumpleaños". El sombrerero explica a Alicia que todo el mundo tiene un día de cumpleaños que celebra una vez al año, pero que también tenemos 364 días de "no cumpleaños" que deben celerbrarse sin necesidad de que en dicha celebración haya grandes manjares y regalos.
Embarazada, entusiasmada y con un toque de romanticismo sobrenatural, quizá promovido por la progesterona (a saber. . .), dije: EUREKA, mi niña se llamará ALICIA.
En mi ideal de maternidad siempre ha estado la idea de inculcarle a mi hija el festejar cada día como si fuese un gran acontecimiento pese a las adversidades que podamos encontrar en un momento dado. Así consideré que el llamarla Alicia es como hacer un homenaje a esa filosofía de vida en la que se valora y disfruta cada momento de lo cotidiano.

Todo en su sitio.

El juego es una actividad intrínseca en los niños y, claro está que, para poder jugar, en la mayoría de los casos, se necesitan juguetes. Pero pienso que el exceso de éstos, en lugar de promover el desarrollo, se obtiene todo lo contrario; niños usureros y materialistas (incluso tiranos).


De los únicos juguetes que me permito el lujo de abusar es de los libros y por ende me hice con una hermosa, a la vez que económica, estantería de ikea que destiné a la colocación de los libros que ibamos comprando a Alice.


Bueno, el caso es que mi pequeña pasa largas horas sacando, ojeando, disfruntado, apilando... libros y juguetes, algo que produce una situación de caos y desorden constante en casa. Así que me he empeñado en que recoja todo lo que deja de usar. Es muy pequeña aún, apenas tiene 20 meses, pero hay que empezar desde peque, si no, luego estamos perdidos.


Hace unos meses le cedi una zona de mi estantería personal para que colocara algunas cositas, no sé... fue algo espontáneo, le dije: Alicia, si quieres colocamos aquí tus animales. Pues resulta asombroso ver cómo siempre que usa los animalitos para jugar, al final, los vuelve a colocar en el mismo lugar que estaban ubicados. Eso sí, unos mirando para Huelva y otros para Almería, pero los vuelve a poner todos juntitos en su casita. He aquí la prueba.

sábado, 6 de agosto de 2011

La hora del sueño

Lo que peor hemos llevado en casa desde que Alice nació es la hora de dormir; aún hoy no sabe dormirse sola y además de nuestros arrumacos y mecidas, el ritual debe ir acompañado de una canción concreta, la archiconocida canción de Marco, aquel niño que vivía en un puerto (o pueblo, según la versión) italiano.

Los disfraces

Esta fuera de ninguna duda que jugar a disfrazarse es una actividad que contribuye al desarrallo infantil. El cuarto de juegos de Alice cuenta con un baulito con algunas telas, pelucas y objetos reciclados de atrezo carnavalesco.

Durante la niñez, el mundo real y el mundo imaginario no están claramente diferenciados y adentrarse en el mundo de la fantasía siempre fue para mí algo muy estimulante. Así que siempre tuve claro que rodearía a mi hija de disfraces y libros, historias y recursos que le permitieran expresar sus sentimientos, empatizar con los demás y descubrir el mundo a través de la magia de los cuentos.

También es cierto que hay disfraces que dan miedo y otros que dependen del punto de vista con que sean enfocados. Es el caso del disfraz de payaso, disfraz que, hasta hace unos días, le encantaba. A menudo abría el baúl y, de entre todos los objetos, la mayoría de las veces optaba por colocarse la peluca de rizos roja, cantar la canción de Miliki HABÍA UNA VEZ UN CIRCO y ser la más payasa de la casa con sus bailes y cantos.

Pero el otro día algo cambió. Llevamos varios días de feria en el pueblo y me pareció oportuno llevar a Alicia a las atracciones de feria. La música alta, las luces de colores, los niños correteando por allí... todo parecía ideal para pasar un ratito de alboroto y diversión, pero no... Las cosas se torcieron con el puñetero TREN DE LA ESCOBA y es que el señor que daba escobazos a los niños era un payaso feo (yo diría terrorífico) y malaje.

Ella se quedó petrificada, los ojos desencajados, se agarraba fuerte a mi ropa y empezó a decir NO, NO, NO... y eso que ni siquiera le propuse subir, sólo vió la atracción de lejos.

Aún no he logrado que olvide la experiencia, en cuanto tiene ocasión empieza a explicotear con su media lengua lo terrible que era ese payaso y SIEMPRE, en sus discursos, concluye dicendo YAZO NO. YAZO NO.

Madre mía... menudo fiasco se ha llevado con los "cacharritos" de la feria.

Poemas de colores

Desde que Alicia era muy muy pequeñita me he esforzado por describirle las características de los objetos cotidianos (y no tan cotidianos), nombres, tamaños, colores... y es una actividad muy fructífera; cuando menos te los esperas te das cuenta de que, aunque no sepa hablar bien, reconoce todos y cada uno de los objetos y entiende todo lo que le dices. El aprendizaje de los colores es algo que le ha gustado mucho, hasta el punto de ir por la calle (con 18 meses) e ir diciéndote de qué color son las cosas que ve.


Para aprenderlos fui ubicando rincones temporales de los colores (el rincón naranja, el rincón amarillo...) y dejábamos objetos de ese color, pero la experiencia no surtió tanto efecto como los poemas que hicimos juntas.

Me los he inventado atendiendo a aquellos objetos que a ella le llaman especialmente la atención.

Hemos hecho un librito para cada color y los tenemos colocados en la pizarra del cuarto de juegos que nos sirve como expositor.

El día del padre.

Se me ocurrió plasmar las huellas de las manos y de los pies con pintura dactilar y añadirle un poema para que Alice pudiera felicitar a su papá en el día del padre.


Semejante obra de arte debía estar ubicada en un lugar privilegiado de la casa, así que los dos cuadros forman parte de un rincón del cuarto de juegos.


Las obras las hemos protegido con unos económicos marquitos iKeales de colores que le dan un toque de color y alegría a la pared.

viernes, 5 de agosto de 2011

Osito.

No he logrado aún comprarlo, he ido a varias librerías y estaba agotado. Será una adquisición vía internet. Lo saqué de la biblioteca del colegio y tengo que decir que le encantó, es un libro muy lindo, contiene historias entrañables de los dos personajes, mamá Osa y Osito (entre otros) que vienen a concluir con otra que las enlaza a todas. Es una preciosidad de libro, a medida que ibamos leyendo acompañábamos la narraciones con inflexiones de voz y canciones de cumpleaños. Alice quedó fascinada con la vida de este libro.

Adivina cuánto te quiero

Este es el libro que más nos gusta a las dos, está cargado de ternura y afecto. Si además a eso le sumas las deliciosas ilustraciones de Anita Jeram, lo convierten en un libro para toda la vida, no hay edad recomendada para este best-seller. Las dos liebres color avellana han cautivado nuestros corazones. Yo te quiero de aquí a la luna y vuelta, Alice.

Juega al escondite en la selva

Es el típico juguete-libro. Tiene texturas diferentes y cuenta con un texto ameno. Cargado de colores vistosos e imágenes de los animales de la selva. Un gran centro de interés para Alice.

Leo con pictogramas

Lo que pueden dar de sí durante la siesta los pictogramas de esta colección. No soy muy amante de los cuentos de hadas tradicinales por los roles estereotipados de los personajes, así que cuando le regalaron a Alice esta colección nunca pensé que pudieran entusiasmarle tanto. Jugamos a encontrarlos, a buscarlos por las páginas dónde se visualizan todos y cada uno de ellos. Le encanta Caperucita, aunque yo me empeñe en desviar la atención hacia Alicia en el país de las maravillas y Peter Pan que son los que me gustan a mi.

¿Quién?

¿Quién tiene una nariz tan larga como una serpiente? EL ELEFANTE!!!!
¿Quién es demasiado gordo como para revolotear como una mariposa? EL CERDO!!!!
Un libro con solapas en el que se establecen semenjanzas entre animales totalmente diferentes a través de imágenes sencillas con aspectos comunes entre unas y otras para poder establecer la relación de parentesco.
Alice lo tuvo como libro de cabecera durante meses.

El pollo pepe

El pollo pepe, es uno de los libros más divertidos que han acompañado a Alice durante su primer año y que, aún hoy, con 20 meses, sigue entusiasmándole, pese a haberlo leido y releído una y otra vez.



Es un libro muy gracioso que nos va contando todo lo que comió el pollo Pepe para llegar a ser como es. Está cargado de pop-ups, el gran pico del pollo llegaba incluso a asustar a mi pequeña cuando se desplegaba. Jaja... ¡¡¡¡Creía que le iba a picar!!!!!.

Es un best seller de la literatura infantil, y su popularidad la tiene bien merecida, mezcla la sencillez con la creatividad de la papiroflexia, la ternura del lindo pollito con la grandeza de su mamá, la gallina. Además viene a constituir una de las lecciones básicas de la granja escuela: DEL HUEVO DE UNA GALLINA SALE UN POLLO!!!!!!!. En este caso viene hasta bautizado con el nombre de PEPE.

Caras de bebés.

Caras de bebés es un libro de la editorial sm. Esta cargado de solapas que cambian los gestos de los bebés que en él aparecen. Niños que sacan la lengua, toman su biberón, abrazan... Alice aprendió desde muy pequeña las partes de la cara gracias a este libro. ¿Qué bebé con cinco meses sabe dónde tiene la lengua? Jeje...
Era algo automático en el momento que aparecía en el libro el niño que sacaba la lengua, ella también sacaba la suya a pasear.

Mira y juega

MIRA Y JUEGA (Libro de tela que puede colocarse en la cuna)

Este libro es una de las primeras adquisiciones que tuvo Alice en cuanto a fondos bibliográficos se refiere, lo elegí por los colores y contrastes y a medida que ha ido creciendo ha ido teniendo diferentes y polivalentes funciones. Dentro tiene unas tarjetas con imágenes de bebés y ella suele hacer imitaciones de los gestos de cada uno de los niños. Las tarjetas son reversibles, aparenciendo en este reverso dibujos de objetos cotidianos. Este libro de tela puede ser útil para colocar fotografías de la familia y preguntar por sus nombres, por experiencias vividas con los diferentes miembros... Propicia la atención y el desarrollo del lenguaje. Su hándicap es el precio, 20 euritos de nada, jeje...

Bienvenida

Este blog está dedicado a plasmar mis experiencias como madre de la niña más maravillosa del mundo. Irá creciendo a medida que ella lo haga.


Este lugar ha empezado a funcionar un poco tarde, es ahora, cuando me encuentro con fuerzas para alimentarlo y proyectar en él el reflejo de las vivencias más especiales al lado de mi hija Alice.